miércoles, 20 de julio de 2011

Aznar busca asesores para intentar limpiarse de su complicidad en escándalo Murdoch

PÚBLICO.ES – José María Aznar no ha roto su silencio sobre su relación con el Grupo Murdoch, pero prepara ya su defensa. El expresidente español y los otros ocho miembros supuestamente independientes del consejo de administración de News Corporation, el imperio de Murdoch, han contratado los servicios del bufete Debevoise & Plimpton para que les asesore acerca de la demanda que el Amalgamated Bank ha presentado contra ellos en Estados Unidos, informó ayer The Guardian. Esta entidad, accionista de News Corp, gestiona fondos de pensiones de empleados públicos. (foto)


“Y no me aclaren mucho
 que obscurece más”
La medida apunta, según el diario británico, a que las tensiones en el seno de la cúpula del imperio de Rupert Murdoch “van en aumento”.
La querella denuncia el laxismo de los miembros del Consejo de Administración (y cita por su nombre a Aznar) a la hora de proteger los intereses de los accionistas de la empresa. También recuerda que el exjefe del Gobierno español cobró 220.000 dólares en 2010 por formar parte de dicho consejo.
Amalgamated Bank, con sede en Nueva York, completó el pasado 8 de julio una demanda interpuesta meses antes en Delaware contra News Corporation por la compra de Shine, una productora propiedad de la hija del magnate australiano, Elizabeth Murdoch, por 615 millones de dólares, una transacción que, en opinión del querellante, perjudica los intereses de los accionistas.
Amalgamated Bank acusa al magnate de “enriquecerse a sí mismo y a los miembros de su familia a costa de los accio-nistas”, al forzar la compra del 100% de la productora de televisión y cine propiedad de Elizabeth Murdoch “sin meta estratégica válida” y con el único propósito de incluir a la hija del magnate en el consejo directivo de News Corp y darle una prima de 250 millones de dólares, un acto de “puro nepotismo”, según argumentan los autores de la demanda.

Aznar, un amigo personal

“La transacción no obedecía a ningún criterio empresarial”, acusa Amalgamated Bank, y sólo tenía como propósito “reforzar el control de Murdoch” sobre la compañía. “Esta es la forma en la que Murdoch y el consejo de administración actúan desde hace años”. El empresario australiano considera News Corporation como su propia “bolsa de golosinas que usa cuando le viene el apetito”.
La compra de Shine y las recientes revelaciones sobre las escuchas telefónicas de News of The World y los otros diarios británicos del grupo a políticos, famosos y víctimas del terrorismo, ilustra “una cultura de descontrol” en la cúpula directiva que se limita a “dar carte blanche” al magnate para que pueda “avanzar sus ideas políticas y proteger a sus amigos y familia de las consecuencias de una conducta impropia o ilegal”.
El banco neoyorquino asegura que “la falta de control del consejo de administración sobre Murdoch le ha permitido, a él y sus altos ejecutivos, mezclar a News Corp en una actividad ilegal”, prueba de que “no puede, o no quiere, evitar que Murdoch dirija” su compañía “como le conviene”. La demanda denuncia que el presidente de News Corp sólo elige a familiares, exejecutivos del grupo o personas que “comparten su ideología”.
Entre estos últimos incluye a José María Aznar, que describe como un “amigo personal” al recordar que el magnate asistió a la boda de la hija del expresidente del Gobierno en El Escorial, en septiembre de 2002; a John Thornton,profesor de la Universidad Tsinghua de Pekín, exdirectivo de Goldman Sachs y, según la demanda, gran partidario de “un capitalismo salvaje”; y Viet Dinh, asesor legal de George Bush, principal redactor del Patriot Act, que después de los atentados del 11-S redujo considerablemente el derecho a la privacidad de los ciudadanos estadounidenses en nombre de la lucha contra el terrorismo.

Impotencia

“Es inconcebible que Murdochy el consejo de administración no estuvieran al corriente de las prácticas ilícitas de los diarios” que dirigían Rebekah Brooks, entonces directora de News of the World y hoy ejecutiva del grupo en Reino Unido, y su sucesor, Andy Coulson, el exasesor de David Cameron. Y, aunque la noticia se conoció en 2005, el consejo “no tomó ninguna verdadera medida para investigar las alegaciones hasta el 7 de julio de 2011, cuando Murdoch eligió a dos de sus subdirectores para enfrentarse al embrollo”.
La demanda subraya “la impotencia del consejo de administración contra el uso que hace Murdoch del dinero de la compañía para satisfacer sus propios objetivos” y lo acusa de “anteponer los intereses de Murdoch” a los de los accionistas de News Corporation.
El consejo directivo, que “se ha negado a funcionar como un organismo de control” y “ha mantenido el silencio” ante los últimos acontecimientos, ya tenía que haber reaccionado en 2005, cuando se supo que el teléfono del príncipe Guillermo había sido intervenido, supuestamente, por News of the World.