miércoles, 6 de julio de 2011

Argentina: Cristina denuncia la doble moral de los medios y prohíbe la oferta de “servicios sexuales”

“No se puede en las primeras páginas de los periódicos exigir al Gobierno que luche contra la trata de personas y luego, en las páginas comerciales, poner los avisos donde se vehiculiza la más formidable y vergonzante humillación a la condición femenina”, sostuvo la presidenta argentina, Cristina Fernández, al anunciar hoy la firma de un decreto que prohíbe a los medios hacer publicidad de oferta sexual, una medida que busca combatir las redes de trata de personas. (foto)


Doble moral en los medios
El decreto, dijo Fernández en un acto, es “un gigantesco paso en la lucha contra la trata de personas” “contra la discriminación”, pues la oferta sexual publicitada, fundamentalmente en los periódicos, “es un vehículo en la comisión del delito de trata de personas y una profunda discriminación hacia la condición de la mujer como tal”.
La mandataria señaló que la medida es un paso “contra la doble moral y la hipocresía” de medios de comunicación que informan sobre el flagelo de las redes de trata de personas y, al mismo tiempo, publican “la oferta sexual que le deja pingües ganancias a las empresas periodísticas que hacen este tipo de cosas”.
La gobernante destacó que desde la aprobación de la ley contra la trata de personas, en abril de 2008, se han rescatado 2.221 personas que estaban atrapadas en redes de ese tipo.
El decreto, además de prohibir la publicación de avisos de oferta sexual, crea una oficina de control bajo la órbita del Ministerio de Justicia.
Esto no es para nada una condena a las mujeres que son objeto de ese comercio. Es una condena a los medios y a los que instrumentan este tipo de cosas, sea a través de la explotación directa o a través de la propagandización de esa explotación a través de los medios de comunicación social“, aclaró Fernández.
Este decreto, añadió, es “un testimonio más de esta voluntad que tenemos en la lucha contra la trata de personas porque hace a la condición humana, y lo vemos como un derecho humano, inalienable e imprescriptible”.
Fuente: AFP