miércoles, 8 de junio de 2011

De tal palo..: Patricia a Rafael Poleo: "Hay ruindades que es mejor no ventilar"

La sangre parece haber llegado al río, porque ni la "famosa" periodista, ni su padre, escatiman esfuerzos por agredirse mutuamente. Con "evidente modestia", la periodista asegura que El Nuevo País creció con sus tubazos. En la firma de la carta recuerda que ganó un premio Rey de España y, tal como presenta las cosas, sugiere a su padre que el periódico prácticamente desaparecerá, una vez que prescinda de sus servicios. "Mis columnas son un producto que causa adicción"- afirma, aunque no aclara si el público adicto pertenece a la más rancia oposición venezolana, o a la más empolvada ultraderecha de Miami. (foto).


P.P Premio Rey de España
DE: PATRICIA POLEO
PARA: RAFAEL POLEO
FECHA: 31 DE MAYO 2011

ASUNTO: RENUNCIA AL DIARIO EL NUEVO PAÍS.

CARTA AL DIRECTOR DE EL NUEVO PAÍS

El jueves 23 de Mayo, es decir hace 5 días, envié el siguiente correo:

Dejé de escribir cuando me enfermé, pero no voy a caer en anécdotas. Entiendo perfectamente que se prefiera a Carlos Peñaloza y a Juan Fernández que están “cuadrados”. Pero estoy clara y me imagino que tú también en que lamentablemente para ellos, la gente me sigue buscando a mí.

Pruebas hay miles como que triplico al señor Fernández por ejemplo en seguidores en twitter cosa que me imagino te parece intrascendente, pero en esta época simplemente no lo es. A Juan Fernández le presté mi prestigio cuando en Miami nadie quería saber de él por traidor. Pero esas cosas no se remiendan tan fácil. En este momento coyuntural, nadie quiere a los traidores. Lo del yerno, no quise responder en mi declaración que la hija de Luisa Estela es la amante del tipo. No la publiques, estás en tu derecho. Yo la pondré en mi twitter. Tu sabes muy bien que la forma de anular a un periodista es no publicándole. Tienes una sola columna acumulada porque yo no envío lo que tengo hasta que se me va publicando. No me conviene profesionalmente la forma en que se está tratando mi trabajo en El Nuevo País.

Ahora resulta que no se escribir, bueno, acepto que ese sea el argumento. Yo respeto todo. Pero eso sí, que el respeto sea de lado y lado. Mis columnas aunque quieran reconocerlo algunos son un producto que causa adicción. No se si pueda decir lo mismo Juan Fernández o Peñaloza pero repito, respeto las decisiones de "arriba".

Yo propongo que se me asigne otra página para escribir temas tres veces por semana. Si estás de acuerdo, las mandaré como dispongamos. Los temas lamentablemente no puedo anunciártelos ya porque gracias a Dios, soy PERIODISTA y lo mío es la INFORMACIÓN.

Patricia
Hasta el momento de escribir el presente correo, no he recibido respuesta a mi planteamiento, acerca de que El Nuevo País me asigne una página distinta a la 3, que es para los grandes temas escritos por Juan Fernández y Carlos Julio Peñaloza.

Asumo que la falta de respuesta, es falta de interés en mi trabajo, por lo que con este correo doy por finalizada mi relación profesional con el Diario EL Nuevo País.

Esto es sólo el lógico final de un proceso que ha venido desarrollándose al gusto de la dirección del periódico, que de exigirme escribir todos los días, pasó a pedirme la columna sólo 3 veces por semana, para después restringirme el número de caracteres y cambiarme a cada vez más temprano la hora de entrega, alegando que era norma para todos los columnistas. (Conservo copia de todos los correos que se me enviaron con estas indicaciones.) Norma que por cierto se quiebra con los ladrillos firmados –no se si escritos- por Juan Fernández y Peñaloza.

Todo esto pasó además por no considerar mi trabajo para los llamados en primera página, y lo que es peor a nivel de ética profesional, temas que ya habían sido publicados por mi después fueron refritos por los señores Fernández y Peñaloza, y desplegados a página entera y con títulos en primera página. Ejemplo de ello fueron los casos lllaramendi y Sicodena, reventados periodísticamente por mí sin que el Consejo Editorial de ENP (Poleo, Fernández y Peñaloza) estimaran colocar los llamados en primera, para después ser refritos por Peñaloza y Fernández. ¡Ah! Pero con titulo en primera, en hecho que además fue burdo pues se trató de un refrito dentro del mismo periódico, sin mencionar lo anti ético de esta estrategia.

A esto hay que agregarle las veces que se me tacharon en los originales de mis columnas, menciones a José Vicente Rangel, y cuando se le agregó a mi columna una frase elogiosa a Vladimir Villegas sin mi autorización. Sobre éste tema se me prometió publicar una aclaratoria cosa que nunca se cumplió.

Me retiro de El Nuevo País con la frente en alto, porque jamás le puse una zancadilla a nadie para llegar al lugar de honor en el que me encuentro profesionalmente. No puedo decir que conmigo la conducta del Consejo Editorial (Poleo-Fernández-Peñaloza) haya sido la misma. Sólo que sin resultados porque para vender periódicos, y de esto si alguien sabe es precisamente Rafael Poleo, hace falta talento (no sé si un imbécil –como RP calificó a JF en su oportunidad- lo sea), y hace falta credibilidad. A pesar de todo no le deseo mal a nadie, mucho menos a la publicación que se levantó con mis tubazos (si alguien quiere que me refute esto públicamente). Sólo les recuerdo que el Tiempo de Dios, simplemente es Perfecto.

Me despido aquí, porque si me extiendo, comenzaré a hablar de las verdaderas razones, muy lejos de las periodísticas, que llevaron al Consejo Editorial (Poleo-Fernández-Peñaloza) a intentar anularme profesionalmente.

Mucha suerte. ¡Ah! Y mucho cuidado con quienes tienen acceso a grabar conversaciones en las que me menciona de la peor manera. No por mí claro. Sino porque dejan evidencias de ruindades que mejor es no ventilar.

Patricia Poleo
PREMIO REY DE ESPAÑA 2001.