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| Rodolfo Muñoz |
Rodolfo Muñoz es una de las figuras clave en el movimiento internacional de periodistas que ha develado las limitaciones de la cobertura informativa –y en muchos casos, la manipulación más cruda- practicada por las grandes cadenas noticiosas norteamericanas. Su papel estelar en la cobertura de los hechos del 30 de septiembre de 2010, cuando una revuelta policial fue la punta de lanza de la frustrada conspiración golpista para secuestrar y asesinar al presidente Rafael Correa, saltó a las primeras planas de los principales diarios. El mismo día renunció a CNN y pasó a liderar los esfuerzos informativos por Ecuador TV (donde hoy sigue trabajando), dando ejemplo de un comportamiento ético que no es frecuente en el periodismo latinoamericano.
“Se me pretendió imponer una visión sobre lo sucedido en Quito a miles de kilómetros de distancia, desde la sede de la empresa en Atlanta”, dijo Muñoz.
Con una trayectoria de 28 años en el periodismo (y 14 en CNN hasta 2010), dirigió un documental sobre lo sucedido aquel 30 de septiembre del año pasado. El resultado es su película “Muchedumbre 30S”, la cual será estrenada a nivel latinoamericano en la Cinemateca Nacional de Venezuela, sede del Museo de Bellas Artes, a las 6 de la tarde del jueves 7 de abril, evento patrocinado conjuntamente por la Embajada de Ecuador y la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) de la República Bolivariana de Venezuela.
.- Ahora que habla de la agencia de noticias que todos sabemos que es CNN, ¿en qué momento de ese 30 de septiembre toma la decisión de desvincularse?
Cuando entendí que ellos no tenían la comprensión cabal de lo que aquí estaba ocurriendo, cuando ellos probablemente creyeron que al Ecuador de hoy le iba a ocurrir lo mismo que al Ecuador de 1995, cuando entramos a un proceso terrible de inestabilidad y concluye en febrero (de 1996) con el derrocamiento de (el presidente de ese entonces, (Abdalá) Bucaram. En esas circunstancias cuando ellos no entendían que en nuestro país se habían producido cambios interesantes, que la gente no podía tener la misma reacción con la política y la democracia como tuvo años atrás, cuando empiezan también los medios locales a tener una posición anticipada juzgando los hechos, convirtiéndose en fiscales primero y después en jueces… cuando yo percibo que la cadena empieza a tener una conducta parecida a la que tenían algunos medios (nacionales) yo considero que era innecesaria mi participación y les informo que decido no trabajar más porque además encuentro que no hubo la suficiente solidaridad de su parte por las circunstancias que vivió mi equipo a lo largo de ese día.
Circunstancias de agravio en contra de nuestros camarógrafos y reporteros por parte de quienes se sublevaron y también circunstancias de inseguridad en todos los ámbitos".
"Llego a Caracas con mucha expectativa para trazar nuevos pasos de acción y desmontar las agendas imperiales", concluyó el periodista ecuatoriano.
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